Las personas son animales. Animales salvajes y animales mansos. la gente no es sino un fiel reflejo de la cadena alimenticia. Miramos y devoramos.
Vamos a por lo que queremos olvidandonos del resto. Somos animales solitarios. No queremos a nadie. Por egoismo. Por envidia. Por miedo. Andamos solos. Vivimos solos. Podemos estar rodeados y aun asi sin nadie quien nos sostenga. A nuestro alrededor se alzan paredes, muros, barreras que apartan y distancias. Infranqueables e invisibles. Sin darnos cuenta. Sin percatarnos. Sin quererlo.
Y solamente cuando estas se vuelven opacas nos damos cuenta. Y buscamos la manada, el grupo, la congregacion, lo nuestro. Y nos sentimos bien. Nos alegramos. Creemos haber vuelto a encontrar el sitio. Nuestro sitio. Y disfrutamos. Nos relacionamos. Y en ciertos llegamos a unirnos.
Pero al tiempo volvemos a notar la llamada. A sentir el incesante sonido de la propia persona. De nuestro interior. Y nos separamos de la manada con una sonrisa y volvemos a la solitaria caza, elevando nuevamente las caidas murallas de nuestro ser.
El lobo vuelve a cazar. Solitario. Alejado de la manada. Pero sabiendo que podra volver. Y se siente feliz, aullando en su interior.
1 comentario:
really cool
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